No sé decir adiós

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Lecina Fernández, Psicóloga Clínica

En la tercera temporada del cineforum “El cine como espejo y modelo de nuestra vida”, organizado por Psicoartaes con el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid y la Academia de Cine, se ha proyectado la película No sé decir adiós de Lino Escalera.

La película cuenta la historia de dos hermanas en el momento de saber que su padre está enfermo y cómo reaccionan los tres personajes ante el proceso de la enfermedad y de la muerte. La película tiene un guión y unos diálogos con mucha naturalidad, frescura y con toques de humor en las conversaciones dentro de una situación de cruda realidad; las imágenes tienen unos bonitos planos y encuadres, simétricos y con estilo arquitectónico en contraste con la asimetría que vive cada uno de los personajes, en muchas ocasiones los personajes se ven reflejados en los cristales de las ventanas, en espejos, como una metáfora de la dualidadde sus vidas, de la realidad que son y la que podrían ser, ya que lo que hacen no es lo que les gustaría hacer. Esta dualidad también se muestra desde la actitud ante la vida: una entenderla como viene, dejarse llevar sin dar tiempo a pensar y otra la de luchar y querer. Dualidad también en la actitud ante la muerte que hay entre y en los personajes. Todo ello se va mostrando en el día a día de los protagonistas, con sus comportamientos —pensamientos, emociones y acciones— ante la enfermedad y la muerte.

En el coloquio[1] se habló del duelo. No sé decir adiós, es un duelo anticipado, muestra muy bien y de una forma muy natural los comportamientos que tenemos las personas ante la enfermedad y ante la muerte. Muestra conductas de negación, conductas de rabia, conductas de conspiración del silencio, conductas que muestran el manejo de la culpa, el peso de los asuntos pendientes, la reacciones de terceras personas ante el dolor y la expresión de emociones comentadas por José González, y muchas más que pueden ir descubriendo con el visionado de la película. Ana Fernández comentó que No sé decir adiós habla del miedo a enfrentarse a la muerte, Pablo Remón añadió el punto de vista del no enfrentarse a la muerte, y en este artículo quiero hacer énfasis en otro punto de vista: el miedo a enfrentarse a la vida. En la película vemos que los personajes se aferran a sus válvulas de escape en lugar de a su vida. Nos ayuda a ver que si queremos jugar a vivir… ¡vivamos! No busquemos vías de escape. No olvidemos que siempre podemos elegir mover ficha. El final va en esta línea y lo aplaudo. Cada persona puede interpretarlo desde la muerte o desde la vida. ¿Qué verá usted?

 Animo a ver la película, a ver la excelente interpretación premiada con un Goya de Nathalie Porta. Nos contó las claves de las que partió para interpretar su personaje, una de ellas el trabajo de separar persona y personaje, y está muy bien conseguido porque al hablar con ella no encontré ni un solo registro de Carla. Muchas felicidades.

 No sé decir adiós. Dirección: Lino Escalera. Guión: Lio Escalera y Pablo Remón. Intérpetes: Nathalie Poza, Juan Diego, Lola Dueñas. Fotografía: Santiago Racaj. País: España 2017. Duración: 96min. Género: Drama, familia, enfermedad.

 



[1] Presentado por María Luisa Oliveira (Fundación Academia de Cine). Participa el guionista Pablo Remón, a actriz Nathalie Poza, José Gonzalez (psicólogo experto en duelo). Modera Ana Fernández Rodríguez, (psicóloga clínica y coordinadora del grupo PSICOARTAES -Psicología y Artes Audiovisuales y escénicas-, del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid.